Mi dilema: corazón o razón, ¿a quién dejo esta vez ganar? Por mucho tiempo decidí dejar que mi razón ganara, dándome diversas hazañas a seguir por las cuales andaba buscando lógica y siendo totalmente pensante.
¿Me sirvió? Sólo aprendí a ver todo con más sombras y con mayor oscuridad, pero no habían sensaciones de felicidad, y con el tiempo deje de sentirlas, poniendome carcaza tras carcaza...¡tenia carcazas para todo! la chica multifacetica, la que andaba siempre sonriente realizando tonterias para poder olvidarse de la gran mochila pesada, gritando por dentro, gritando tan fuerte que todo ya estaba desgarrado. Me llevó a cegarme, a no confiar, a encerrarme en mi misma, a dejar toda la sensibilidad y la pasión dentro de una jaula...sin ganas de tener cambios y mucho menos, de arriesgarme a nuevas cosas y estas cosas, salían mal o peor de lo que podia esperar, haciendo de esto un circulo vicioso...que nunca acababa.
Luego de un tiempo, empecé a fluir, por un angel que toco las fibras mas dolorosas en mi, las toco con tanta delicadeza, pero apesar de ello no terminaba de creer todo lo que sentía, todo lo que quería...empecé a creer que lo sueños se pueden volver realidad si crees y tienes fe, si buscas hacer todo en base a ellos...pero, ¿pero hasta qué punto?, Cuándo es que debes parar de buscar, de hacer todo lo que sientes hacer...porque ya no vez cambios favorables hacia lo que buscas, y si estan pues no los sientes, cuándo debes parar y buscar por otro camino, aunque eso implica alejarte temporalmente de lo que más anhelas en todo este mundo. Ya tienes todo, sólo te falta una cosa, o una persona para empezar a vivir tu sueño. ¿Cuándo debes forzarte a buscar otro camino, que aunque te duela y te vuelva a hacer trizas, y no te haga feliz, sabes que en el fondo es una de las mejores formas para que otros puedan ver dentro de sí mismos y enocnrar lo que buscan? Tu corazón te dirá las palabras, te dirá lo que sientes...hago lo que siento sin saber logro algo bueno, sin saber si sale o no lo que quiero.
Ojalá el viento te diga lo que siento, pues cuando andas a mi lado todo cambia. No se sienten, temores, no se siente tristeza, no se siente dolor, pero al partir... todo ello regresa. Luchar junto a mi corazón es lo que he decidido, pero hay mil peleas en mi cuerpo y mil experiencias que me persiguen por fuera e intentan convecerme de que lo mejor es darle tiempo al tiempo. Confieso la idea me aterra, tengo miedo que alguno de mis actos me lleve a nunca más tener el único sueño que más me importa en mi vida, con los demás puedo vivir y trabajarlos pues dependen únicamente de mi. Quiero hacer mi visión, tú visión, realidad, ¡Voy hacerlo realidad!
Ojalá que el viento te diga lo que siento, y que acaricie tu rostro mientras mis manos no estan, y las hojas que golpeen suavemente tu cuerpo sean mis besos una vez más en tu piel. No estoy completamente a tu lado, pero camino con tus pasos...pues en nuestra vida, juntos siempre hemos andado, de un sólo molde dos especies distintas (canina y felina).